Estimadas familias, alumnado y compañeros... ¡bienvenidos al curso 2013-2014!
Comenzamos esta nueva andadura trabajando los valores, en concreto la generosidad. Para ello he estado contándole al alumnado de Educación Infantil el cuento, editado por Manos Unidas, "El sueño de Chispa", que narra cómo un atento y generoso girasol llamado Chispa ayuda a la oca Fito en un percance que le ha sucedido. Si quereis leer el cuento completo podeis consultarlo en el siguiente enlace:
Después de cada sesión hemos ido trabajando algunas actividades para consolidar lo aprendido en el cuento. Aquí os dejo dos flores realizadas por Kayla y por Kyra (4 años) que representan a Chispa.
 |
| Girasol realizado por Kayla (4 años) |
 |
| Girasol realizado por Kyra (4 años) |
Aunque avanzamos con respecto a tiempos pasados, y no por ello debiéramos rasgarnos las vestiduras, pues ni todo es tan bueno ahora, ni todo lo pasado fue tan malo, ciertos avances producen algo de confusión en algunas, o muchas, personas.
ResponderEliminarEl que seamos un estado laico es indudable que es un paso importante. El aceptar que cada uno de nosotros es libre de creer en lo que más nos plazca y pueda practicar la religión que siente, es un gran paso. Y respetar al prójimo y sus creencias es fundamental.
Pero, ¿qué nos ha pasado?
Y me refiero al cambio de ser confesionalmente católicos, a habernos olvidado completamente de lo que ello significa; o qué fue lo que nos aportó en nuestra adolescencia y que no hemos sabido transmitir a nuestros hijos. Con ello quiero admitir que posiblemente esté pasando con muchas otras religiones lo mismo, o no. Todas tienen sus valores, que básicamente serán los mismos, pero estamos fallando en la transmisión.
La confusión a la que me refería al principio es que asociemos el ser católicos con pertenecer a un régimen político anterior o ser partidarios de izquierdas o derechas, o sabe Dios que otros disparates.
Parece como si algunos se avergonzaran de ser lo que son, sin pensar en el carácter que imprime esa responsabilidad que en otros tiempos nos inculcaron.
No vale decir que la actuación de unos u otros es responsable de que ahora creamos menos o no creamos. Somos humanos y, como tal, cometemos equivocaciones. Por eso usamos la razón, para separar lo útil de lo inútil, y vale para todas las creencias.
Y como estamos fallando en la transmisión, es necesario recordar que en otros tiempos, al menos, había una asignatura impartida por personas cuya misión era hacer salir ese carácter que todos llevamos dentro, y es la Religión.
Personalmente, ya que sabemos que su definición siempre ha sido, es y será, muy compleja, me quedo con la definición filosófica, que es :
“La religión puede ser un estilo de vida, un camino hacia la plenitud, una plenitud que inicia desde el mismo instante que se cobra conciencia de la misma.”
Y es por ello, por transmitir esos valores que nos hemos olvidado, o no tenemos tiempo, que quiero agradecerte, desde estas líneas, Chencho. GRACIAS, con mayúsculas.
José Manuel Díaz ( padre de Kayla Díaz Hegger )
Muchísimas gracias por su reflexión y compartirla en este blog, que no es otro sino el de ustedes mismos y el de sus hijos e hijas.
ResponderEliminarCoincido en muchas de las ideas que has comentado, no para transmitirlas a mi alumnado pero si para reflexionarlas como padre de dos hijos que tengo. Y desde aquí invito al resto de la comunidad educativa a participar con sus reflexiones, bien vía telemática mediante el blog o bien creando un grupo de debate en la propia escuela aprovechando el horario de visitas de padres.